Me llamo Michael y escribo estas líneas con el corazón roto, pero lleno de esperanza. Mi padre, Eronim, es para mí no sólo el progenitor que me crió, sino también mi héroe, el hombre que me enseñó lo que significan el amor, el sacrificio y el valor. Ahora, sin embargo, se enfrenta a la batalla más dura de su vida: el cáncer de pulmón.

En los últimos meses, nuestras vidas han cambiado radicalmente. El tratamiento que podría darle una oportunidad real de vivir está fuera de nuestras posibilidades económicas. Los costes ascienden a 6.000 euros, una cantidad que para nosotros, en este momento, parece imposible de alcanzar, pero que representa la única esperanza para mi padre.

Eronim es un buen hombre, que ha trabajado toda su vida para darnos lo mejor que tenía. Le veo luchar día a día, con una fuerza que me inspira y me duele al mismo tiempo. Quiero darle una oportunidad, ayudarle a quedarse con nosotros, seguir compartiendo momentos, verle sonreír de nuevo.

Hoy apelo a vuestra bondad y generosidad. Cada euro, cada oración, cada buen pensamiento cuenta. Juntos, podemos dar a mi padre la oportunidad de seguir luchando.

Si puedes implicarte, ya sea a través de un donativo o compartiendo este mensaje, te lo agradeceré de todo corazón. Ninguna contribución es demasiado pequeña cuando viene del corazón.

Gracias de todo corazón por tu apoyo y por leer nuestra historia. Esperamos que juntos podamos darle a mi padre la oportunidad que se merece.

Con gratitud,

Michael