Años de problemas de salud, graves afecciones médicas y estrés, y aún así trabajamos muy duro para tener una vida lo mejor posible. Desgraciadamente, en la economía actual no pudimos alcanzar nuestro objetivo de tener nuestro propio pedazo de felicidad y alegría. Un hogar.

Mi marido (44) se mudó a otro país para estar conmigo (31), donde no habla el idioma ni entiende la cultura, me hizo la persona más feliz del planeta, y luego tuvo un derrame cerebral 2 meses después del día de nuestra boda, perdió su trabajo, no cobró. Los aterradores días que nos esperaban estaban llenos de auténtico miedo, tristeza, pero también esperanza, todo ello mientras estábamos atrapados en un bucle de crisis existencial. Covid pasó, sin trabajo, mantenida con un sueldo, incluyendo el mantenimiento de mis padres, muchas deudas, sin salida. Ha sido una lucha desde entonces.

A día de hoy somos incapaces de mantenernos sólidamente sobre nuestros propios pies. Dicen que no eres débil si pides ayuda, así que pensamos en intentarlo.

Recurrimos el uno al otro en busca de amor y apoyo, pero nos gustaría construir algo que podamos cultivar juntos y vivir nuestro sueño.

Gracias de antemano.