El 4 de julio de 2025, al amanecer, una súbita explosión rasgó el silencio de Via dei Gordiani. Una estación de GLP, justo enfrente de nuestro club deportivo, estalló con un estruendo que destruyó no sólo edificios y coches... sino también nuestra casa. Villa De Sanctis no es sólo un centro deportivo. Es un refugio. Un lugar donde cientos de niños aprenden a jugar, a crecer, a sonreír. Donde familias enteras se reúnen cada día para vivir el deporte, la amistad y la comunidad.

Hoy, todo esto ha desaparecido.

• Las pistas de tenis están devastadas por los escombros y los cascotes, intransitables.
• Las piscinas, símbolo del verano para tantos niños, están inutilizables.
• Nuestro centro de verano, que sólo unas horas antes albergaba a niños y animadores llenos de vida, fue evacuado justo a tiempo.
• Cristales rotos, estructuras dañadas, equipos destruidos.

Tuvimos suerte. Nadie resultó herido. Pero lo que construimos con años de pasión, trabajo, sacrificio... ahora yace bajo los escombros.

Por qué pedimos su ayuda

Recuperar todo esto llevará mucho tiempo y enormes recursos. Y no podemos hacerlo solos. Cada euro

recaudado se destinará a:

• Restaurar las zonas deportivas (tenis, fútbol sala, piscina)
• Reparar daños estructurales en edificios y vestuarios
• Garantizar la seguridad de niños y socios
• Reactivar el centro de verano para no apagar el verano de los que cuentan con nosotros

Un pequeño gesto, una gran señal

Si aunque sea una vez has vivido una tarde feliz en Villa De Sanctis, si has visto crecer a tu hijo en estos campos, si crees que el deporte es más que un juego,

Échanos una mano.

Comparte. Dona. Ayúdanos a empezar de nuevo. Porque Villa De Sanctis no es sólo nuestra: es de todos. Y ahora necesita de todos.

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