Todos hemos sido víctimas de la violencia, de un modo u otro. Ya se trate de violencia doméstica, familiar, sexual, escolar, física o psicológica, ya seas hombre, mujer o persona sin género, de cualquier condición social y origen étnico, nadie se salva.

El objetivo de este proyecto fotográfico es estar a la vista de todos, levantar el velo sobre un tabú, un tema silenciado o trivializado por oscuras justificaciones.

Más de 30 personas han aceptado ponerse delante de la cámara, compartir sus historias, sus sentimientos, ahondar en su pasado, alzar la voz para acallar el silencio que rodea a esta violencia. Para acallar la vergüenza que pesa sobre las víctimas y hacer que cambie de bando.

Seguimos necesitando tu ayuda para hacer oír nuestras voces. Para que todo no sea en vano y para que pueda abrirse paso en la conciencia de hoy.

El objetivo de esta colección es ayudar a imprimir estos clichés, así que si esta causa resuena contigo, por favor, haz algo.

Un pequeño gesto de muchos marca una gran diferencia.