Escribo con el corazón roto en nombre de mi amiga, que nunca pediría ayuda por sí misma. Es una persona que lleva su carga en silencio, siempre dispuesta a ayudar a los demás, pero ahora necesita desesperadamente nuestra ayuda, aunque no lo sepa ni se atreva a pedirla.

Mi amiga es una persona amable, cariñosa y amante de los animales que se ha enfrentado a retos en su vida que muchos nunca podrían imaginar. Siempre ha sido de las que encuentra fuerzas en los momentos más difíciles, pero ahora su carga es demasiado pesada. Las dificultades económicas la han empujado a una situación en la que el desahucio de su casa es una amenaza real.

Su casa es algo más que un lugar: es un refugio seguro sin el cual le sería imposible empezar a reconstruir su vida. Aunque intenta sobrevivir sola, sé que nos necesita. Ella no conoce esta colecta, pero espero que juntos podamos darle la ayuda que ni ella misma se atrevería a pedir.

Mi objetivo es recaudar 4.000 euros para cubrir los atrasos del alquiler, pero sé que es una cantidad grande y un reto difícil de alcanzar. Por eso quiero insistir: incluso un pequeño donativo marca la diferencia. Cada euro la acercará a una solución y la ayudará a hacer frente a otras facturas hasta que su situación empiece a mejorar.

Nuestra ayuda puede darle la chispa de esperanza que necesita para volver a ponerse en pie. Tu donación no es sólo dinero: es un mensaje de que no está sola.

Gracias si puedes ayudar. ❤️