¿Puede una palabra destruirlo todo? Sí, si es leucemia. Desde enero estoy librando una batalla contra el cáncer en la que está en juego mi vida.

He estado luchando durante un año con esta cosa horrible y yo esperaba que todo iba bien, por desgracia, después de la 1ª quimioterapia - 37% Las células cancerosas reaparecieron.

Después de la quimioterapia adicional, esperaba que todo iría bien, por desgracia después de 3 semanas el 21 de enero de 2025 ya había esperanza para la última quimioterapia para destruir mi médula ósea para un lugar para el donante, por desgracia, la recurrencia de ya el 50% del cáncer.

Todo empezó discretamente... En otoño contraje hemiplejia y después de la infección quise hacerme un análisis de sangre de control. El resultado me sorprendió: tenía casi 10 veces más glóbulos blancos de lo normal. Sabía lo que esto podía significar, pero por un día aún tuve la esperanza de que se tratara de un error. Por desgracia, el nuevo examen no dejó lugar a dudas. Escuché el veredicto: leucemia mieloide aguda.

Cada día veo cómo entran en mi cuerpo más y más gotas de quimioterapia; siento como si fueran ellas las que miden el tiempo que me queda. He visto en la sala a personas de mi edad e incluso más jóvenes que han perdido la batalla contra la leucemia. Hasta la más mínima infección o fiebre puede matarnos a los enfermos... Tengo miedo de que la próxima vez la MUERTE venga a por mí.

Actualmente me encuentro en una situación económica muy difícil, sólo cobro una modesta pensión. Necesito ayuda para pagar la medicación necesaria y la posterior rehabilitación. Hay veces que tengo que elegir entre comer algo más o comprar una receta en la farmacia. Todo esto me supone una enorme carga mental. A veces pienso que es un mal sueño y que me despertaré sana, capaz de trabajar y que seré yo quien ayude a los demás.