Soy el propietario de la primera empresa de Bulgaria que fabrica urnas biodegradables. Mis urnas están hechas para descomponerse al ser enterradas. La diferencia es que junto con la ceniza se puede plantar un árbol. Tras muchas dificultades y contratiempos, conseguí patentar el producto y sacarlo al mercado. Con mis urnas, muchos deudos han conmemorado a sus seres queridos o mascotas plantando un árbol. Esto sólo es posible para quienes tienen casa y pueden plantar el árbol en su jardín.

Quiero crear algo hermoso para el día más oscuro en que perdemos a un ser querido o una mascota. En Bulgaria no hay ni un solo parque cementerio donde se permita plantar árboles. Quiero hacer el primer parque que se construya sólo con árboles. Un parque donde cualquiera pueda plantar un árbol con las cenizas de un ser querido y honrarlo de la forma más natural.

Se plantarán arbolitos, no semillas, y cada doliente podrá cuidar del joven árbol en crecimiento y mantener así vivo el recuerdo.

Estoy recaudando fondos para comprar árboles, para el tratamiento del suelo, césped y mármol, piedra o cualquier otro material para los monumentos conmemorativos.

En Bulgaria hay un grave problema con los cementerios. Cada vez más gente prefiere ser incinerada, pero los lugares para poner las urnas son pocos y desagradables.

Ayúdame a crear el jardín de Heаvеn y a ayudar a otros en su dolor.